1. »¡Qué mal te va a ir, Jerusalén!Eres una ciudad desobediente,y maltratas a los demás.¡Estás llena de pecado!
2. No aceptas consejos de nadie,ni permites que se te corrija;no me buscas ni confías en mí.
3. »Tus jefes más importantesparecen leones feroces;tus gobernantes parecen lobos,que atacan por la nochey no dejan nada para la mañana.
4. Tus profetas son orgullosos,y no se puede confiar en ellos;tus sacerdotes ofenden mi santuarioy no obedecen mis mandamientos.
5. ¡Esos malvados no tienen vergüenza!»Yo estoy en ti, Jerusalén,para hacerte bien,no para hacerte daño.Todos los días te trato con justicia.
6. »Yo he destruido naciones,y he derribado sus torres;ya no hay nadie que caminepor sus calles solitarias;sus ciudades están desiertas,pues no queda un solo habitante.
7. »Todo esto lo hice por ti, Jerusalén.Pensé que así me obedeceríasy no tendría que castigarte.Pero tus habitantes se dieron prisapara cometer toda clase de maldad.
19-20. Éste es su mensaje:«Cuando llegue ese día,ayudaré a los indefensosy castigaré a quienes los maltratan.Yo haré que cambie la suertede los que ahora andan dispersos,y los haré volver a su tierra.¡Esto lo verán ustedes mismos!»Si antes los ofendían,ahora sólo hablarán bien de ustedes,y la fama de ustedes llegaráa todos los países de la tierra.Yo, el Dios de Israel,juro que así será».