7. Si me enseñas tu palabra,te alabaré de todo corazón
8. y seré obediente a tus mandatos.¡No me abandones!
9. Sólo obedeciendo tu palabrapueden los jóvenes corregir su vida.
12. ¡Bendito seas, mi Dios!¡Enséñame a obedecer tus mandatos!
16. Mi mayor placer son tus mandatos;jamás me olvido de ellos.
20. Todo el día siento grandes deseospor conocerlas.