9. El Mar de los Juncos quedó secocuando oyó tu reprensión;tú hiciste que nuestros abueloscruzaran el fondo del marcomo si cruzaran el desierto.
12. Entonces nuestros padrescreyeron en tus promesasy te cantaron alabanzas;
13. pero al poco tiempose olvidaron de tus hechosy no esperaron a conocerlos planes que tenías.
14. Eran tantas sus ganas de comerque allí, en pleno desierto,te pusieron a pruebay te exigieron comida.
15. Y tú los complaciste,pero también les enviasteuna enfermedad mortal.
18. ¡llamas de fuego cayeronsobre esa pandilla de malvados!
19. Nuestros abuelosllegaron al monte Horeb,y allí hicieron un ídolo;¡adoraron un toro de metal!
20. Dejaron de adorar a Dios,que era su motivo de orgullo,para adorar la imagen de un toro.
23. y tan enojado se puso Diosque quiso destruirlos.Moisés, su elegido,intervino en favor de ellosy calmó el enojo de Diospara que no los destruyera.