7. »Si alguien me presenta como ofrenda un cordero,
8. deberá poner sus manos sobre la cabeza del animal y matarlo a la entrada del santuario. Luego, los sacerdotes derramarán la sangre en los costados del altar,
17. »Ustedes nunca deben comer grasa ni sangre. No importa dónde vivan, ésta es una ley que deberán obedecer siempre».