47. Sufrimos en carne propialos horrores de la destrucción.
48. Cuando vi destruida mi ciudadno pude contener las lágrimas.
49-51. Realmente me duele ver sufrira las mujeres de Jerusalén.Se me llenan de lágrimas los ojos,pero no hay quien me consuele.¡Espero que desde el cieloDios nos mire y nos tenga compasión!
52-53. ¡Intentaron matarme,y no sé por qué razón!Mis enemigos me atraparon,me encerraron en un pozo.
54. Estuve a punto de ahogarme;¡creí que había llegado mi fin!
55. En la profundidad de ese pozote pedí ayuda, Dios mío,
56. y tú atendiste mis ruegos;¡escuchaste mi oración!