3. Llámame y te responderé. Te haré conocer cosas maravillosas y misteriosas que nunca has conocido.
6. »Sin embargo, más adelante les devolveré la paz y la tranquilidad, y los haré disfrutar de una vida segura.
7. Haré que vuelvan del país adonde fueron llevados prisioneros, para que reconstruyan su ciudad y vuelvan a ser tan fuertes como antes.
8. Los limpiaré de todas las maldades y pecados que cometieron contra mí, y les perdonaré su rebeldía.
9. La ciudad de Jerusalén vivirá en paz y bienestar, y recibirá mis bendiciones. Además, me dará fama y alegría. Cuando todas las naciones vean esto, se asombrarán y temblarán de miedo».
10. Dios también me dijo:«Según dicen ustedes, este lugar está destruido y no hay en él gente ni animales. Es verdad. Las ciudades de Judá están en ruinas, y por las calles de Jerusalén no se ve gente ni animales, pero yo les aseguro que de nuevo se poblará la ciudad,
11. y volverán a oírse las serenatas de los enamorados, y los gritos de gozo y alegría. También se escucharán las alabanzas de los que van hacia mi templo llevando ofrendas de agradecimiento. Irán cantando:“¡Alabemos al Dios de Israel!¡Alabemos al Dios todopoderoso!¡Nuestro Dios es buenoy nunca deja de amarnos!”»¡Yo les juro que los haré volver del país adonde fueron llevados prisioneros, y todo volverá a ser como al principio!»
14. »Viene el día en que cumpliré la promesa maravillosa que le hice a la gente de Israel y de Judá.
15. Cuando llegue ese día, en el momento preciso nombraré a un rey de la familia de David, que reinará con honradez y justicia.
16. Entonces el reino de Judá estará a salvo, y en Jerusalén habrá seguridad. Por eso la llamarán “Dios es nuestra justicia”.
17. »En Israel siempre habrá un rey de la familia de David.
18. De igual manera, siempre tendré a mi servicio sacerdotes que desciendan de Leví. Ellos presentarán en mi altar las ofrendas de cereal que se queman en mi honor, y también las que se me ofrecen todos los días».
19. Dios volvió a hablarme, y me dijo: