7. la mujer de su amo se fijó en él, y le propuso:—¡Ven, acuéstate conmigo!
8. En vez de aceptar, José le contestó:—Mi amo confía en mí, y por eso ha dejado todo a mi cargo. Estando yo al frente de todas sus riquezas, él no tiene nada de qué preocuparse.
9. No me ha prohibido nada, y en esta casa nadie tiene más autoridad que yo. Pero usted es su esposa. Tener relaciones sexuales con usted, sería pecar contra Dios.
10. Y aunque todos los días ella le insistía, él la rechazaba.