1-3. Abram tenía ya diez años de vivir en Canaán, y su esposa Sarai aún no había podido tener hijos. Pero como ella tenía una esclava egipcia que se llamaba Agar, le propuso a su esposo: «Abram, como Dios no me deja tener hijos, acuéstate con mi esclava y ten relaciones sexuales con ella. Según nuestras costumbres, cuando ella tenga un hijo ese niño será mío, porque ella es mi esclava».Abram estuvo de acuerdo. Entonces Sarai tomó a su esclava y se la entregó a su esposo.
4. Abram se acostó con Agar, y ella quedó embarazada.Cuando Agar se dio cuenta de que iba a tener un hijo, comenzó a despreciar a Sarai.
5. Entonces Sarai le reclamó a Abram:—Tú tienes la culpa de que Agar me trate con desprecio. Recuerda que fui yo quien te la entregó. Ahora resulta que como está embarazada, se siente superior a mí. Por eso Dios habrá de castigarte.
6. Abram le respondió:—Haz con ella lo que quieras, pues Agar es tu esclava.Fue así como Sarai comenzó a maltratarla, y Agar se vio obligada a huir.
7. Cuando Agar llegó al manantial que está en el desierto de Sur, junto al camino que lleva a Egipto, Dios salió a su encuentro
8. y le dijo:—Agar, esclava de Sarai, ¿qué haces aquí? ¿A dónde vas?Y ella le contestó:—Estoy huyendo de mi dueña.
15-16. Cuando Abram tenía ochenta y seis años, nació el hijo que tuvo con Agar, y Abram le puso por nombre Ismael.