Ezequiel 30:13-17-21 Traducción en Lenguaje Actual (TLA)

2-3. «Ezequiel, hombre mortal, dile de mi parte a Egipto:“¡El día de tu castigoya está cerca!¡Grita de dolor!¡Ese día será nublado!¡Día terrible para todas las naciones!

4. Habrá guerra contra Egipto,y hasta Etiopía temblará de miedo.Muchos egipcios perderán la vida,y perderán también sus riquezas;¡sus ciudades serán destruidas!

5. ”En esa guerra moriránlos países vecinos de Egipto:Libia, Lidia y Etiopía,Arabia y los países aliados”.

6. »Por eso yo, el Dios de Israel, afirmo:“Los que se unan a Egiptomorirán en la batalla.Presumían de ser poderosos,pero serán humillados.Desde Migdol hasta Asuán,sus cadáveres quedarán tiradospor todo el territorio egipcio.Les juro que cumpliré mi palabra.

7. ”No habrá en ninguna parteciudades más destruidasque las ciudades egipcias.

8. Yo le prenderé fuego a Egipto,y acabaré con todos los pueblosque le prestaron ayuda.De ese modo reconoceránque yo soy el Dios de Israel.

9. ”Etiopía está muy confiada,pero yo enviaré mensajeros por marpara que la espantencuando yo castigue a Egipto.¡Ese día ya está cerca!

13-17. ”En Menfisdestruiré a los dioses falsos,¡esos ídolos malolientes!Egipto se quedará sin rey,y todos los que allí vivense llenarán de miedo.Destruiré la ciudad de Patros;a Soan le prenderé fuego,y a Tebas le daré su merecido.Sobre la ciudad de Sindescargaré mi enojo,y nunca más volverá a serla fortaleza de Egipto.Acabaré con las riquezas de Tebas,y dejaré que en sus murallasse abran grandes huecos.A todo Egipto le prenderé fuego,y todos en el puerto de Sinse retorcerán de dolor.Menfis, On y Bubastisserán conquistadas en pleno día.Los jóvenes morirán en la batalla,y las mujeres serán hechas prisioneras.Les juro que cumpliré mi palabra.

18. ”Egipto es un país poderoso,y eso lo llena de orgullo;pero, cuando yo lo destruya,todo el país quedará a oscuras;se nublará la ciudad de Tafnes,y sus mujeres serán capturadas.

19. Cuando yo le dé a Egiptoel castigo que se merece,reconocerán que yo soy Dios”».

20. Habían pasado once años desde que llegamos presos a Babilonia. El día siete del mes de Abib, Dios me dijo:

21. «Ezequiel, hombre mortal, ya le he roto un brazo al rey de Egipto, y no podrá volver a tomar su espada para pelear. Está herido, y nadie lo ha curado ni le ha vendado las heridas.

Ezequiel 30