1-2. En cierta ocasión, Nabucodonosor tuvo unos sueños muy extraños, y se quedó tan inquieto que ya ni dormir podía. Entonces mandó llamar a todos los sabios y adivinos que había en su reino, pues quería que le dijeran qué significado tenían sus sueños. Cuando esto sucedió, Nabucodonosor llevaba dos años de ser rey. Los sabios y adivinos se presentaron ante el rey,
3. y el rey les dijo:—Tuve un sueño, y me preocupa no saber lo que significa.
4. Como los sabios hablaban arameo, le contestaron al rey en ese idioma:—Nosotros estamos para servir a Su Majestad, y le deseamos muchos años de vida. Si Su Majestad nos cuenta su sueño, nosotros le diremos lo que significa.
7. Los sabios volvieron a decirle:—Si Su Majestad nos cuenta lo que soñó, nosotros le diremos lo que significa.
10. Los sabios se defendieron:—Nunca ningún rey, por más poderoso que fuera, les ha pedido a sus sabios y adivinos responder a algo tan difícil. Ni hay nadie en el mundo capaz de adivinar lo que Su Majestad quiere saber.