12. Entonces los dos profetas oyeron una voz fuerte, que les decía: «¡Suban aquí!»Ellos subieron al cielo en una nube, a la vista de todos sus enemigos.
13. En ese mismo instante hubo un gran terremoto, que destruyó la décima parte de la ciudad, y siete mil personas murieron. Los sobrevivientes tuvieron mucho miedo y alabaron a Dios, que está en el cielo.
14. Ése fue el segundo desastre, pero el tercero viene pronto.