10. Ana estaba tan triste que no dejaba de llorar. Por eso oró a Dios
11. y le hizo esta promesa:«Dios todopoderoso, yo soy tu humilde servidora. Mira lo triste que estoy. Date cuenta de lo mucho que sufro; no te olvides de mí. Si me das un hijo, yo te lo entregaré para que te sirva sólo a ti todos los días de su vida. Como prueba de que te pertenece, nunca se cortará el cabello».
14. Por eso le dijo:—¿No te da vergüenza estar borracha? ¡Deja ya la borrachera!
17. Entonces Elí le contestó:—Vete tranquila, y que el Dios de Israel te conceda lo que has pedido.
18. Y Ana le dijo:—¡Usted sí me comprende!Dicho esto, Ana regresó a comer y dejó de estar triste.
19. A la mañana siguiente, Elcaná y su familia fueron al santuario para adorar a Dios, y después de eso regresaron a su casa en Ramá.Tiempo después, Elcaná y su esposa Ana tuvieron relaciones sexuales, y Dios permitió
20. que ella quedara embarazada. Cuando nació el niño, Ana le puso por nombre Samuel, porque Dios contestó su oración.
21. Al año siguiente, cuando llegó el tiempo de ir al santuario para presentar la ofrenda acostumbrada, Elcaná fue a Siló con toda su familia para cumplir su promesa.
22. Pero Ana no quiso ir con ellos, y por eso le dijo a su marido:—Cuando el niño ya pueda comer solo, yo misma lo llevaré al santuario y se lo entregaré a Dios. Allí se quedará a vivir.