9. ¡Bendito sea tu Dios, a quien le agradó tu conducta y te hizo rey de Israel para que gobiernes con justicia! No hay duda, ¡Dios ama a Israel!»
13. El rey Salomón le dio a la reina de Sabá todo lo que ella le pidió, además de los regalos que él ya le había preparado. Después ella volvió a su país con sus consejeros.
14. Cada año el rey Salomón recibía alrededor de veintidós mil kilos de oro,
15. sin contar los impuestos que le pagaban los comerciantes, los reyes de Arabia y los gobernantes del país.
18. También mandó hacer un trono grande de marfil, recubierto con oro puro.
19. El respaldo era redondo y tenía dos brazos. Al lado de cada brazo había un león de pie. El trono tenía seis escalones
20. y a ambos lados de cada escalón había un león de pie. ¡Ningún otro rey tenía un trono tan hermoso!
21. Todas las copas del rey y todos los platos del palacio «Bosque del Líbano» eran de oro puro. En aquella época no había nada de plata porque no la consideraban de mucho valor.
22. Los barcos del rey Salomón y los del rey Hiram viajaban juntos, y cada tres años traían de Tarsis oro, plata, marfil, monos y pavos reales.
23. El rey Salomón era más sabio y más rico que todos los reyes de esa región.
24. Todo el mundo quería verlo y escuchar la sabiduría que Dios le había dado,
25. así que cada año le llevaban regalos de oro y plata, ropas, perfumes, caballos y mulas.
26. Salomón reunió mil cuatrocientos carros y doce mil jinetes. Algunos estaban en los cuarteles de carros de guerra y otros formaban su guardia personal en Jerusalén.