Salmos 28:5-9 Sagradas Escrituras 1569 (SEV)

5. Porque no entendieron las obras del SEÑOR, y el hecho de sus manos, los derribará, y no los edificará.

6. Bendito el SEÑOR, que oyó la voz de mis ruegos.

7. El SEÑOR es mi fortaleza y mi escudo; en él esperó mi corazón, y fui ayudado; por tanto se gozó mi corazón, y con mi canción le alabaré.

8. El SEÑOR es la fortaleza de su pueblo, y el esfuerzo de las saludes de su ungido.

9. Salva a tu pueblo, y bendice a tu heredad; y pastoréalos y ensálzalos para siempre.

Salmos 28