Proverbios 21:25-31 Sagradas Escrituras 1569 (SEV)

25. El deseo del perezoso le mata, porque sus manos no quieren trabajar.

26. Hay quien todo el día codicia; mas el justo da, y sigue dando.

27. El sacrificio de los impíos es abominación; ¡cuánto más ofreciéndolo con maldad!

28. El testigo mentiroso perecerá; mas el hombre que oye, permanecerá en su dicho.

29. El hombre impío endurece su rostro; mas el recto ordena sus caminos.

30. No hay sabiduría, ni inteligencia, ni consejo, contra el SEÑOR.

31. El caballo se apareja para el día de la batalla; mas del SEÑOR es el salvar.

Proverbios 21