14. Si algo pidiereis en mi nombre, yo lo haré.
15. Si me amáis, guardad mis mandamientos;
16. y yo rogaré al Padre, y os dará otro Consolador, para que permanece con vosotros para siempre:
17. Al Espíritu de Verdad, al cual el mundo no puede recibir, porque no le ve, ni le conoce; pero vosotros le conocéis; porque permanece con vosotros, y será en vosotros.
18. No os dejaré huérfanos; vendré a vosotros.