1 Reyes 8:48-58 Sagradas Escrituras 1569 (SEV)

48. y si se convirtieren a ti de todo su corazón y de toda su alma, en la tierra de sus enemigos que los hubieren llevado cautivos, y oraren a ti hacia su tierra, que tú diste a sus padres, hacia la ciudad que tú elegiste y la Casa que yo he edificado a tu nombre;

49. tú oirás en los cielos, en la habitación de tu morada, su oración y su súplica, y les harás derecho;

50. y perdonarás a tu pueblo que había pecado contra ti, y todas sus rebeliones con que se habrán rebelado contra ti; y harás que hagan con ellos misericordia los que los hubieren llevado cautivos;

51. porque ellos son tu pueblo y tu heredad, que tú sacaste de Egipto, de en medio del horno de hierro.

52. Que tus ojos estén abiertos a la oración de tu siervo, y a la plegaria de tu pueblo Israel, para oírlos en todo aquello por lo que te invocaren;

53. pues que tú los apartaste para ti por tu heredad de todos los pueblos de la tierra, como lo dijiste por mano de Moisés tu siervo, cuando sacaste a nuestros padres de Egipto, oh Señor DIOS.

54. Y fue, que cuando acabó Salomón de orar al SEÑOR toda esta oración y súplica, se levantó de estar de rodillas delante del altar del SEÑOR con sus manos extendidas al cielo;

55. y se puso en pie, y bendijo a toda la congregación de Israel, diciendo en voz alta:

56. Bendito sea el SEÑOR, que ha dado reposo a su pueblo Israel, conforme a todo lo que él había dicho; ninguna palabra de todas sus promesas que dijo por Moisés su siervo, ha faltado.

57. Sea con nosotros el SEÑOR nuestro Dios, como fue con nuestros padres; y no nos desampare, ni nos deje;

58. incline nuestro corazón hacia sí, para que andemos en sus caminos, y guardemos sus mandamientos y sus estatutos y sus derechos, los cuales mandó a nuestros padres.

1 Reyes 8