Lucas 8:49-55 Reina Valera Gómez (RVG)

49. Hablando aún Él, vino uno del príncipe de la sinagoga a decirle: Tu hija ha muerto, no molestes más al Maestro.

50. Y oyéndolo Jesús, le respondió, diciendo: No temas; cree solamente, y será sanada.

51. Y entrado en casa, no dejó entrar a nadie, sino a Pedro, y a Jacobo, y a Juan, y al padre y a la madre de la muchacha.

52. Y lloraban todos, y hacían duelo por ella. Y Él dijo: No lloréis; no está muerta, sino duerme.

53. Y se burlaban de Él, sabiendo que estaba muerta.

54. Mas Él echó fuera a todos, y tomándola de la mano, le habló, diciendo: Muchacha, levántate.

55. Entonces su espíritu volvió, y se levantó en seguida; y Él mandó que le diesen de comer.

Lucas 8