Jeremías 5:8-18 Reina Valera Gómez (RVG)

8. Como caballos bien alimentados de mañana, cada cual relinchaba tras la esposa de su prójimo.

9. ¿No he de castigar por esto? dice Jehová. De una gente como ésta ¿no se ha de vengar mi alma?

10. Escalad sus muros, y destruid; mas no hagáis consumación: quitad las almenas de sus muros, porque no son de Jehová.

11. Porque obstinadamente se rebelaron contra mí la casa de Israel y la casa de Judá, dice Jehová.

12. Negaron a Jehová, y dijeron: Él no es, y no vendrá mal sobre nosotros, ni veremos espada ni hambre;

13. y los profetas serán como el viento, y no hay en ellos palabra; así se hará a ellos.

14. Por tanto, así dice Jehová Dios de los ejércitos: Porque hablasteis esta palabra, he aquí yo pongo mis palabras en tu boca por fuego, y a este pueblo por leña, y los consumirá.

15. He aquí yo traigo sobre vosotros gente de lejos, oh casa de Israel, dice Jehová; gente robusta, gente antigua, gente cuya lengua ignorarás, y no entenderás lo que hablare.

16. Su aljaba es como sepulcro abierto, todos ellos son valientes.

17. Y comerán tu mies y tu pan, que habían de comer tus hijos y tus hijas; comerán tus ovejas y tus vacas, comerán tus viñas y tus higueras; y espada destruirán tus ciudades fortificadas en que tú confías.

18. Mas en aquellos días, dice Jehová, no os destruiré del todo.

Jeremías 5