Jeremías 13:3-14 Reina Valera Gómez (RVG)

3. Y vino a mí por segunda vez la palabra de Jehová, diciendo:

4. Toma el cinto que compraste, que está sobre tus lomos, y levántate, y ve al Éufrates, y escóndelo allá en la concavidad de una peña.

5. Fui pues, y lo escondí junto al Éufrates, como Jehová me mandó.

6. Y sucedió que después de muchos días me dijo Jehová: Levántate, y ve al Éufrates, y toma de allí el cinto que te mandé escondieses allá.

7. Entonces fui al Éufrates, y cavé, y tomé el cinto del lugar donde lo había escondido; y he aquí que el cinto se había podrido; para ninguna cosa era bueno.

8. Y vino a mí la palabra de Jehová, diciendo:

9. Así dice Jehová: Así haré podrir la soberbia de Judá, y la mucha soberbia de Jerusalén.

10. Este pueblo malo, que no quieren oír mis palabras, que andan en las imaginaciones de su corazón, y se fueron en pos de dioses ajenos para servirles, y para adorarles, vendrá a ser como este cinto, que para ninguna cosa es bueno.

11. Porque como el cinto se junta a los lomos del hombre, así hice juntar a mí toda la casa de Israel y toda la casa de Judá, dice Jehová, para que me fuesen por pueblo y por fama, y por alabanza y por honra; pero no escucharon.

12. Les dirás, pues, esta palabra: Así dice Jehová, Dios de Israel: Todo odre será llenado de vino. Y ellos te dirán: ¿Acaso no sabemos que todo odre será llenado de vino?

13. Entonces les dirás: Así dice Jehová: He aquí que yo lleno de embriaguez a todos los moradores de esta tierra, aun a los reyes que se sientan sobre el trono de David, y a los sacerdotes y profetas, y a todos los moradores de Jerusalén;

14. y los quebrantaré el uno contra el otro, los padres con los hijos juntamente, dice Jehová: No perdonaré, ni tendré piedad ni misericordia, para no destruirlos.

Jeremías 13