Hechos 5:32-42 Reina Valera Gómez (RVG)

32. Y nosotros somos testigos suyos de estas cosas, y también el Espíritu Santo, el cual ha dado Dios a los que le obedecen.

33. Ellos, oyendo esto, se enfurecieron, y tomaron consejo para matarlos.

34. Entonces levantándose en el concilio un fariseo llamado Gamaliel, doctor de la ley, honorable ante todo el pueblo, mandó que hiciesen sacar por un momento a los apóstoles,

35. y les dijo: Varones israelitas, mirad por vosotros lo que vais a hacer acerca de estos hombres.

36. Porque antes de estos días se levantó Teudas, diciendo que era alguien; al que se agregó un número de como cuatrocientos hombres; el cual fue muerto, y todos los que le obedecían fueron dispersados y reducidos a nada.

37. Después de éste, se levantó Judas el galileo, en los días del empadronamiento, y llevó en pos de sí a mucho pueblo. Éste también pereció; y todos los que le obedecían fueron dispersados.

38. Y ahora os digo: Apartaos de estos hombres, y dejadlos; porque si este consejo o esta obra es de los hombres, se desvanecerá;

39. pero si es de Dios, no la podréis deshacer; no seáis tal vez hallados luchando contra Dios.

40. Y convinieron con él; y llamando a los apóstoles, después de azotarlos, les intimaron que no hablasen en el nombre de Jesús, y los dejaron libres.

41. Y ellos partieron de la presencia del concilio, gozosos de haber sido tenidos por dignos de padecer afrenta por su Nombre.

42. Y todos los días, en el templo y por las casas, no cesaban de enseñar y predicar a Jesucristo.

Hechos 5