5. Y sabéis que Él apareció para quitar nuestros pecados, y no hay pecado en Él.
6. Todo aquel que permanece en Él, no peca; todo aquel que peca, no le ha visto, ni le ha conocido.
7. Hijitos, nadie os engañe; el que hace justicia, es justo, como también Él es justo.
8. El que hace pecado, es del diablo; porque el diablo peca desde el principio. Para esto apareció el Hijo de Dios, para deshacer las obras del diablo.