74. Que sin temor librados de nuestros enemigos, Le serviríamos
75. En santidad y en justicia delante de él, todos los días nuestros.
76. Y tú, niño, profeta del Altísimo serás llamado; Porque irás ante la faz del Señor, para aparejar sus caminos;
77. Dando conocimiento de salud á su pueblo, Para remisión de sus pecados,