San Mateo 20:23-34 Reina-Valera 1960 (RVR1960)

23. Él les dijo: A la verdad, de mi vaso beberéis, y con el bautismo con que yo soy bautizado, seréis bautizados; pero el sentaros a mi derecha y a mi izquierda, no es mío darlo, sino a aquellos para quienes está preparado por mi Padre.

24. Cuando los diez oyeron esto, se enojaron contra los dos hermanos.

25. Entonces Jesús, llamándolos, dijo: Sabéis que los gobernantes de las naciones se enseñorean de ellas, y los que son grandes ejercen sobre ellas potestad.

26. Mas entre vosotros no será así, sino que el que quiera hacerse grande entre vosotros será vuestro servidor,

27. y el que quiera ser el primero entre vosotros será vuestro siervo;

28. como el Hijo del Hombre no vino para ser servido, sino para servir, y para dar su vida en rescate por muchos.

29. Al salir ellos de Jericó, le seguía una gran multitud.

30. Y dos ciegos que estaban sentados junto al camino, cuando oyeron que Jesús pasaba, clamaron, diciendo: ¡Señor, Hijo de David, ten misericordia de nosotros!

31. Y la gente les reprendió para que callasen; pero ellos clamaban más, diciendo: ¡Señor, Hijo de David, ten misericordia de nosotros!

32. Y deteniéndose Jesús, los llamó, y les dijo: ¿Qué queréis que os haga?

33. Ellos le dijeron: Señor, que sean abiertos nuestros ojos.

34. Entonces Jesús, compadecido, les tocó los ojos, y en seguida recibieron la vista; y le siguieron.

San Mateo 20