7. Por tanto, hermanos, tened paciencia hasta la venida del Señor. Mirad cómo el labrador espera el precioso fruto de la tierra, aguardando con paciencia, hasta que reciba la lluvia temprana y la tardía.
8. Tened también vosotros paciencia; fortaleced vuestros corazones, porque la venida del Señor se acerca.
9. Hermanos, no os quejéis unos contra otros, para que no seáis condenados; he aquí, el juez ya está a las puertas.
10. Hermanos míos, tomad como ejemplo de aflicción y de paciencia a los profetas que hablaron en nombre del Señor.