9. Oh Dios, a ti cantaré un cántico nuevo; con salterio, con decacordio cantaré a ti,
10. el que da salvación a los reyes, el que rescata a su siervo David de maligna espada.
11. Rescátame y sálvame de manos de los hijos de extranjeros, cuya boca habla vanidad y cuya diestra es diestra de mentira.
12. Sean nuestros hijos como plantas crecidas en su juventud, nuestras hijas como columnas de esquinas labradas a manera de las de un palacio.