1. ¡El oro ha perdido su lustre!¡Se ha empañado el oro fino!¡Regadas por las esquinas de las callesse han quedado las joyas sagradas!
2. A los apuestos habitantes de Sión,que antaño valían su peso en oro,hoy se les ve como vasijas de barro,¡como la obra de un alfarero!
3. Hasta los chacales ofrecen el pechoy dan leche a sus cachorros,pero Jerusalén ya no tiene sentimientos;¡es como los avestruces del desierto!
4. Tanta es la sed que tienen los niños,que la lengua se les pega al paladar.Piden pan los pequeñuelos,pero nadie se lo da.
5. Quienes antes comían los más ricos manjareshoy desfallecen de hambre por las calles.Quienes antes se vestían de fina púrpurahoy se revuelcan en la inmundicia.
6. Más grande que los pecados de Sodomaes la iniquidad de Jerusalén;¡fue derribada en un instante,y nadie le tendió la mano!
7. Más radiantes que la nieve eran sus príncipes,y más blancos que la leche;más rosado que el coral era su cuerpo;su apariencia era la del zafiro.
8. Pero ahora se ven más sucios que el hollín;en la calle nadie los reconoce.Su piel, reseca como la leña,se les pega a los huesos.
9. ¡Dichosos los que mueren por la espada,más que los que mueren de hambre!Torturados por el hambre desfallecen,pues no cuentan con los frutos del campo.