Jueces 18:1-9 Nueva Versión Internacional (NVI)

1. En aquella época no había rey en Israel, y la tribu de Dan andaba buscando un territorio propio donde establecerse, porque hasta ese momento no había recibido la parte que le correspondía de entre las tribus de Israel.

2. Desde Zora y Estaol los danitas enviaron a cinco de sus hombres más valientes, para que espiaran la tierra y la exploraran. Les dijeron: «Vayan, exploren la tierra.»Los hombres entraron en la región montañosa de Efraín y llegaron hasta la casa de Micaías, donde pasaron la noche.

3. Cuando estaban cerca de la casa de Micaías, reconocieron la voz del joven levita; así que entraron allí y le preguntaron:—¿Quién te trajo aquí? ¿Qué haces en este lugar? ¿Qué buscas aquí?

4. El joven les contó lo que Micaías había hecho por él, y dijo:—Me ha contratado, y soy su sacerdote.

5. Le dijeron:—Te rogamos que consultes a Dios para que sepamos si vamos a tener éxito en nuestro viaje.

6. El sacerdote les respondió:—Vayan en paz. Su viaje tiene la aprobación del Señor.

7. Los cinco hombres se fueron y llegaron a Lais, donde vieron que la gente vivía segura, tranquila y confiada, tal como vivían los sidonios. Gozaban de prosperidad y no les faltaba nada. Además, vivían lejos de los sidonios y no se relacionaban con nadie más.

8. Cuando volvieron a Zora y Estaol, sus hermanos les preguntaron:—¿Cómo les fue?

9. Ellos respondieron:—¡Subamos, ataquémoslos! Hemos visto que la tierra es excelente. ¿Qué pasa? ¿Se van a quedar ahí, sin hacer nada? No duden un solo instante en marchar allí y apoderarse de ella.

Jueces 18