Juan 18:27-34 Nueva Versión Internacional (NVI)

27. Pedro volvió a negarlo, y en ese instante cantó el gallo.

28. Luego los judíos llevaron a Jesús de la casa de Caifás al palacio del gobernador romano. Como ya amanecía, los judíos no entraron en el palacio, pues de hacerlo se contaminarían ritualmente y no podrían comer la Pascua.

29. Así que Pilato salió a interrogarlos:—¿De qué delito acusan a este hombre?

30. —Si no fuera un malhechor —respondieron—, no te lo habríamos entregado.

31. —Pues llévenselo ustedes y júzguenlo según su propia ley —les dijo Pilato.—Nosotros no tenemos ninguna autoridad para ejecutar a nadie —objetaron los judíos.

32. Esto sucedió para que se cumpliera lo que Jesús había dicho, al indicar la clase de muerte que iba a sufrir.

33. Pilato volvió a entrar en el palacio y llamó a Jesús.—¿Eres tú el rey de los judíos? —le preguntó.

34. —¿Eso lo dices tú —le respondió Jesús—, o es que otros te han hablado de mí?

Juan 18