16. Una silueta se plantó frente a mis ojos,pero no pude ver quién era.Detuvo su marcha,y escuché una voz que susurraba:
17. »“¿Puede un simple mortal ser más justo que Dios?¿Puede ser más puro el hombre que su Creador?
18. Pues si Dios no confía en sus propios siervos,y aun a sus ángeles acusa de cometer errores,
19. ¡cuánto más a los que habitan en casas de barro,cimentadas sobre el polvo y aplastadas como polilla!
20. Entre la aurora y el ocaso pueden ser destruidosy perecer para siempre, sin que a nadie le importe.