6. El que recibe instrucción en la palabra de Dios, comparta todo lo bueno con quien le enseña.
7. No se engañen: de Dios nadie se burla. Cada uno cosecha lo que siembra.
8. El que siembra para agradar a su naturaleza pecaminosa, de esa misma naturaleza cosechará destrucción; el que siembra para agradar al Espíritu, del Espíritu cosechará vida eterna.
9. No nos cansemos de hacer el bien, porque a su debido tiempo cosecharemos si no nos damos por vencidos.
10. Por lo tanto, siempre que tengamos la oportunidad, hagamos bien a todos, y en especial a los de la familia de la fe.
11. Miren que les escribo de mi puño y letra, ¡y con letras bien grandes!
12. Los que tratan de obligarlos a ustedes a circuncidarse lo hacen únicamente para dar una buena impresión y evitar ser perseguidos por causa de la cruz de Cristo.
13. Ni siquiera esos que están circuncidados obedecen la ley; lo que pasa es que quieren obligarlos a circuncidarse para luego jactarse de la señal que ustedes llevarían en el cuerpo.
14. En cuanto a mí, jamás se me ocurra jactarme de otra cosa sino de la cruz de nuestro Señor Jesucristo, por quien el mundo ha sido crucificado para mí, y yo para el mundo.
15. Para nada cuenta estar o no estar circuncidados; lo que importa es ser parte de una nueva creación.
16. Paz y misericordia desciendan sobre todos los que siguen esta norma, y sobre el Israel de Dios.
17. Por lo demás, que nadie me cause más problemas, porque yo llevo en el cuerpo las cicatrices de Jesús.