1 Samuel 27:1-8 Nueva Versión Internacional (NVI)

1. Con todo, David pensaba: «Un día de éstos voy a morir a manos de Saúl. Lo mejor que puedo hacer es huir a la tierra de los filisteos. Así Saúl se cansará de buscarme por el territorio de Israel, y podré escapar de sus manos.»

2. Acompañado de sus seiscientos hombres, David se puso en marcha y se trasladó a la tierra de Gat, donde reinaba Aquis hijo de Maoc.

3. Tanto David como sus hombres se establecieron allí, y quedaron bajo la protección de Aquis. Cada hombre había llevado a su familia, y David tenía consigo a sus dos esposas, Ajinoán la jezrelita y Abigaíl de Carmel, la viuda de Nabal.

4. En efecto, cuando Saúl se enteró de que David había huido a Gat, dejó de perseguirlo.

5. David le dijo a Aquis: «Si en verdad cuento con el favor de Su Majestad, le ruego que me conceda algún pueblo en el campo, y allí viviré. No tiene ningún sentido que este siervo suyo viva en la capital del reino.»

6. Aquel mismo día Aquis le dio la ciudad de Siclag, la cual hasta hoy pertenece a los reyes de Judá.

7. David vivió en territorio filisteo un año y cuatro meses.

8. Acostumbraba salir en campaña con sus hombres para saquear a los guesureos, guirzitas y amalecitas, pueblos que durante mucho tiempo habían habitado la zona que se extiende hacia Sur y hasta el país de Egipto.

1 Samuel 27