45. Luego se acercó a sus discípulos y les dijo: «¡Adelante, duerman y descansen! Pero miren, ha llegado la hora y el Hijo del Hombre es traicionado y entregado en manos de pecadores.
46. Levántense, vamos. ¡Miren, el que me traiciona ya está aquí!».
47. Mientras Jesús hablaba, llegó Judas, uno de los doce discípulos, junto con una multitud de hombres armados con espadas y palos. Los habían enviado los principales sacerdotes y los ancianos del pueblo.
48. El traidor, Judas, había acordado con ellos una señal: «Sabrán a cuál arrestar cuando lo salude con un beso».
49. Entonces Judas fue directamente a Jesús.—¡Saludos, Rabí! —exclamó y le dio el beso.
50. Jesús dijo:—Amigo mío, adelante, haz lo que viniste a hacer.Entonces los otros agarraron a Jesús y lo arrestaron;
51. pero uno de los hombres que estaban con Jesús sacó su espada e hirió al esclavo del sumo sacerdote cortándole una oreja.
52. «Guarda tu espada —le dijo Jesús—. Los que usan la espada morirán a espada.