14. Luego Jesús llamó a la multitud para que se acercara y oyera. «Escuchen, todos ustedes, y traten de entender.
15. Lo que entra en el cuerpo no es lo que los contamina; ustedes se contaminan por lo que sale de su corazón».
17. Luego Jesús entró en una casa para alejarse de la multitud, y sus discípulos le preguntaron qué quiso decir con la parábola que acababa de emplear.