Lucas 5:29-39 Nueva Traducción Viviente (NTV)

29. Más tarde, Leví dio un banquete en su casa, con Jesús como invitado de honor. Muchos de los cobradores de impuestos, compañeros de Leví, y otros invitados comieron con ellos.

30. Así que los fariseos y los maestros de la ley religiosa les reclamaron severamente a los discípulos de Jesús diciéndoles: «¿Por qué comen y beben con semejante escoria?».

31. Jesús les contestó: «La gente sana no necesita médico, los enfermos sí.

32. No he venido a llamar a los que se creen justos, sino a los que saben que son pecadores y necesitan arrepentirse».

33. Cierto día, algunas personas le dijeron a Jesús:—Los discípulos de Juan el Bautista ayunan y oran con frecuencia, igual que los discípulos de los fariseos. ¿Por qué tus discípulos están siempre comiendo y bebiendo?

34. Jesús contestó:—¿Acaso los invitados de una boda ayunan mientras festejan con el novio? Por supuesto que no;

35. pero un día el novio será llevado, y entonces sí ayunarán.

36. Luego Jesús les dio la siguiente ilustración: «Nadie quita un pedazo de tela de una prenda nueva y la usa para remendar una prenda vieja; pues la prenda nueva se arruinaría y el remiendo nuevo no haría juego con la prenda vieja.

37. »Nadie pone vino nuevo en cueros viejos; pues el vino nuevo reventaría los cueros, el vino se derramaría, y los cueros quedarían arruinados.

38. El vino nuevo debe guardarse en cueros nuevos.

39. Ni nadie que prueba el vino añejo parece querer el vino nuevo. Pues dicen: “El añejo es mejor”».

Lucas 5