3. Fue despreciado y rechazado:hombre de dolores, conocedor del dolor más profundo.Nosotros le dimos la espalda y desviamos la mirada;fue despreciado, y no nos importó.
4. Sin embargo, fueron nuestras debilidades las que él cargó;fueron nuestros dolores los que lo agobiaron.Y pensamos que sus dificultades eran un castigo de Dios;¡un castigo por sus propios pecados!
5. Pero él fue traspasado por nuestras rebelionesy aplastado por nuestros pecados.Fue golpeado para que nosotros estuviéramos en paz,fue azotado para que pudiéramos ser sanados.