16. “No —dijeron ustedes—, nuestra ayuda vendrá de Egipto;ellos nos darán caballos veloces para entrar en batalla”.Sin embargo, la única velocidad que verán¡será la de sus enemigos dándoles caza!
17. Uno de ellos perseguirá a mil de ustedesy cinco de ellos los harán huir a todos.Quedarán como un asta de bandera solitaria sobre una colinao como un estandarte hecho jirones en la cima de un monte lejano».
18. Así que el Señor esperará a que ustedes acudan a élpara mostrarles su amor y su compasión.Pues el Señor es un Dios fiel.Benditos son los que esperan su ayuda.