20. Así es, le he entregado la tierra de Egipto como recompensa por su esfuerzo, dice el Señor Soberano, porque trabajaba para mí cuando destruyó a Tiro.
21. »Llegará el día cuando haré revivir la antigua gloria de Israel, y por fin, Ezequiel, respetarán tus palabras. Entonces sabrán que yo soy el Señor».