9. He estado contigo dondequiera que has ido y destruí a todos tus enemigos frente a tus propios ojos. ¡Ahora haré que tu nombre sea tan famoso como el de los grandes que han vivido en la tierra!
10. Le daré una patria a mi pueblo Israel y lo estableceré en un lugar seguro donde nunca será molestado. Las naciones malvadas no lo oprimirán como lo hicieron en el pasado,
11. cuando designé jueces para que gobernaran a mi pueblo Israel; y te daré descanso de todos tus enemigos.»”Además, el Señor declara que construirá una casa para ti, ¡una dinastía de reyes!
12. Pues cuando mueras y seas enterrado con tus antepasados, levantaré a uno de tus hijos de tu propia descendencia y fortaleceré su reino.
13. Él es quien edificará una casa —un templo— para mi nombre, y afirmaré su trono real para siempre.
14. Yo seré su padre, y él será mi hijo. Si peca, lo corregiré y lo disciplinaré con vara, como lo haría cualquier padre.
15. Pero no le retiraré mi favor como lo retiré de Saúl, a quien quité de tu vista.
16. Tu casa y tu reino continuarán para siempre delante de mí, y tu trono estará seguro para siempre”».
17. Entonces Natán regresó adonde estaba David y repitió todo lo que el Señor le había dicho en la visión.
18. Entonces el rey David entró y se sentó delante del Señor y oró:«¿Quién soy yo, oh Señor Soberano, y qué es mi familia para que me hayas traído hasta aquí?
19. Y ahora, Señor Soberano, sumado a todo lo demás, ¡hablas de darle a tu siervo una dinastía duradera! ¿Tratas a todos de esta manera, oh Señor Soberano?