2 Crónicas 12:4-10 Nueva Biblia Latinoamericana de Hoy (NBLH)

4. Y tomó las ciudades fortificadas de Judá y llegó hasta Jerusalén.

5. Entonces el profeta Semaías vino a Roboam y a los príncipes de Judá que se habían reunido en Jerusalén por causa de Sisac, y les dijo: "Así dice el Señor: 'Ustedes me han abandonado, por eso también Yo los abandono en manos de Sisac.'"

6. Y los príncipes de Israel y el rey se humillaron y dijeron: "Justo es el Señor."

7. Cuando el Señor vio que se habían humillado, vino la palabra del Señor a Semaías, diciendo: "Se han humillado; no los destruiré, sino que les concederé cierta libertad y Mi furor no se derramará sobre Jerusalén por medio de Sisac.

8. Pero serán sus siervos para que aprendan la diferencia entre servirme a Mí y servir a los reinos de los países."

9. Subió, pues, Sisac, rey de Egipto, contra Jerusalén y tomó los tesoros de la casa del Señor y los tesoros del palacio del rey. De todo se apoderó; se llevó hasta los escudos de oro que había hecho Salomón.

10. Entonces el rey Roboam hizo en su lugar escudos de bronce, y los entregó al cuidado de los jefes de la guardia que custodiaban la entrada de la casa del rey.

2 Crónicas 12