12. Por los pecados de su boca, por la maldad que hay en sus labios, que caigan en la trampa de su orgullo, de sus maldiciones y de sus mentiras.
13. Destrúyelos en tu ira. Aniquílalos, y sepan también las naciones que Dios reina en Israel y regirá por todo el mundo.
14. Mis enemigos salen al anochecer, y rondan la ciudad aullando como perros en busca de comida.
15. Andan en busca de comida pero se duermen sin quedar satisfechos.
16. En cuanto a mí, cada mañana cantaré de tu poder y misericordia. Porque tú has sido mi gran torre de refugio, sitio seguro en el día de mi angustia.
17. ¡Oh fortaleza mía, a ti canto mis alabanzas porque tú eres mi refugio, mi Dios de misericordia!