Miqueas 1:4-12 Nueva Biblia al Día (NBD)

4. Es tanto el poder y la fuerza que irradia, que los montes se derriten a su paso y fluyen como cera puesta en el fuego; los valles se dividen como cortados por las aguas que se desbordan con fuerza.

5. ¿Y por qué ocurre esto? ¡Por los actos malvados cometidos por los israelitas, por las maldades de los descendientes de Jacob! En Samaria se admiran los actos malvados de los israelitas; en Jerusalén abundan las injusticias y toda clase de maldad.

6. Por lo tanto, toda la ciudad de Samaria será derribada y se convertirá en un montón de ruinas, se verá después del castigo como si fuera un campo arado para plantar viñas. El SEÑOR destruirá sus murallas y sus fortalezas defensivas; dejará al descubierto sus cimientos, y las piedras con las que fueron construidas serán arrancadas y esparcidas por el valle.

7. Todas las imágenes de sus ídolos serán destruidas, ya sea con fuego o a golpes de martillo. Como esos ídolos fueron hechos con el salario que recibían las prostitutas, serán quemados y convertidos en monedas para pagar a las prostitutas.

8. Lloraré y me sentiré muy triste; andaré descalzo y desnudo. Aullaré como si fuera un chacal, y chillaré como si fuera un avestruz herido.

9. El motivo de mi tristeza es que Samaria ha sido herida de muerte, y no hay remedio que la cure. Y lo peor es que su mal ha llegado hasta Judá. ¡Se ha extendido hasta la entrada de Jerusalén, que es mi pueblo!

10. ¡No digan nada de esto en la ciudad de Gat, ni se pongan a llorar! ¡Revuélquense en el polvo por la angustia y en la vergüenza de la ciudad de Bet Leafrá!

11. Allí van los de Safir, llevados como esclavos, azotados, desnudos y avergonzados. Los habitantes de Zanán no se atreven a salir fuera de sus murallas. Los habitantes de Bet Ésel están llorando, y ustedes se quedan sin su apoyo.

12. El pueblo de Marot en vano anhela días mejores; sólo amargura les espera porque el SEÑOR ha extendido su castigo hasta alcanzar a Jerusalén.

Miqueas 1