Job 29:8-13 Nueva Biblia al Día (NBD)

8. Los jóvenes me veían y se apartaban, y hasta los ancianos se levantaban respetuosos a mi llegada.

9. Los príncipes se mantenían silenciosos y se tapaban la boca con la mano.

10. Los más altos dignatarios de la ciudad guardaban silencio.

11. Todos se regocijaban al oír mis palabras. Hablaban bien de mí cuantos me veían.

12. Pues yo, como juez honrado ayudaba a los pobres en sus necesidades y a los huérfanos que carecían de defensor.

13. Ayudaba a quienes estaban a punto de perecer, y ellos me bendecían. Y yo ponía en el corazón de las viudas un canto de alegría.

Job 29