2. Un instante abre su corola como flor, y se marchita; como sombra de efímera nube, pronto se desvanece.
3. ¿Tan duro has de ser con los frágiles hombres, y exigirles cuentas?
4. ¿Cómo puedes exigir pureza de quien nació impuro?
5. Brevísima vida has concedido al hombre; no le das más que unos meses. No puede tener ni una pequeña prórroga de vida.
6. ¿No le otorgarás algún reposo? Aparta tu mirar airado y concédele unos momentos de alivio antes que muera.
7. »Porque para el árbol hay esperanza: si lo cortan, retoña y produce nuevas ramas tiernas.
18-19. »Los montes se desgastan y desaparecen. Las rocas se desprenden de su sitio. El agua convierte en arena las rocas. Los torrentes erosionan el suelo. De igual modo desvaneces tú la esperanza humana.
20-21. Siempre prevaleces sobre el hombre, y él desaparece del escenario. Lo vuelves viejo y arrugado, y luego lo despides. Jamás se entera si sus hijos alcanzan honra; si fracasan y se enfrentan al desastre, él no lo sabe.
22. Sólo siente el dolor de su cuerpo y la aflicción de su alma».