7. No digas eso, respondió el SEÑOR, pues tú irás a dondequiera que yo te envíe y anunciarás lo que yo te diga.
8. Y no le tengas miedo al pueblo, porque yo, el SEÑOR, estaré contigo y te libraré en caso de peligro.
9. Luego el SEÑOR me tocó la boca y dijo: Mira, te he dado la capacidad de comunicar mis mensajes.
10. Hoy comienza tu trabajo: prevenir a las naciones y a los pueblos del mundo. De acuerdo con mis palabras, expresadas por tu boca, yo derribaré a unos y los destruiré, y plantaré y cuidaré a otros, los fortaleceré y los engrandeceré.
11. Luego el SEÑOR me dijo:Mira, Jeremías, ¿qué ves?Y yo respondí:YVeo una rama de almendro.
12. Y el SEÑOR respondió:Eso es, y significa que sin duda alguna vez ejecutaré mis amenazas de castigo.
13. Luego me preguntó:¿Qué ves ahora?Y yo respondí:YVeo una vasija de agua hirviendo que se ladea hacia el sur.