4. Hace mucho tiempo mi pueblo emigró a Egipto y vivió allí como esclavo, y ahora, sin causa alguna, Asiria lo ha maltratado.
5. Y ahora ¿qué ocurre?, pregunta el SEÑOR. ¿Por qué vuelve mi pueblo a estar cautivo y oprimido sin causa alguna? Quienes lo gobiernan se burlan de ellos, y me insultan día tras día.
6. Pero llegará el día en que mi pueblo me conocerá. ¡Sabrá quién es el que les dice: «¡Aquí estoy para salvarlos!»
7. ¡Cuán hermosos son sobre los montes los pies de quienes traen la feliz noticia de paz y salvación, la nueva de que el Dios de Israel reina!
8. Los centinelas gritan y cantan de júbilo, porque con sus propios ojos ven al SEÑOR traer de regreso a su pueblo.