Génesis 31:35-53 Nueva Biblia al Día (NBD)

35. Raquel le dijo a Labán:—Padre, perdóname que no me levante, pero estoy con la menstruación.Labán siguió buscando sus ídolos, pero no los encontró.

36. Entonces Jacob se enojó, y en tono fuerte le dijo a Labán:—¿Qué mal te he hecho, para que me hayas perseguido como si yo fuera un criminal?

37. ¡Has registrado todas mis cosas! Dime, ¿encontraste algo que sea tuyo? Si es así, entonces, colócalo aquí para que todos los que están aquí lo vean y digan quién tiene la razón.

38. Veinte años te serví y todo ese tiempo cuidé tus ovejas y tus cabras para que tuvieran crías sanas, y jamás saqué un cordero de los tuyos para comérmelo.

39. Si alguno era atacado por los animales salvajes y moría, yo me hacía cargo de la pérdida. Me hacías pagar cada animal que se robaban, fuera mía la culpa o no.

40. En el día me quemaba el sol y en la noche tiritaba de frío. ¡A veces ni siquiera podía dormir!

41. Sí, veinte años: catorce para pagar tus dos hijas, y seis para formar mis rebaños. ¡Y muchas veces me cambiaste el salario!

42. En realidad, de no ser por la gracia del Dios de mi abuelo Abraham, el glorioso Dios de mi padre Isaac, tú me habrías despedido sin abonar un centavo a mi cuenta. Pero Dios vio tu crueldad y mi duro trabajo, y por eso es que se te apareció anoche y te reprendió.

43. Labán contestó:—Estas mujeres son mis hijas, y estos niños son mis nietos. También las ovejas y todo lo que ves me pertenece. ¿Cómo crees que yo quiera ahora hacerles daño a mis hijas y a mis nietos?

44. Ven ahora y firmemos un pacto de paz, tú y yo. ¡Ese pacto será testigo de nuestro acuerdo!

45. Entonces Jacob tomó una piedra y la colocó como un pilar, para que les sirviera de prueba.

46. Luego les dijo a sus familiares que reunieran piedras y las amontonaran. Una vez hecho esto, comieron sobre ese montón de piedras.

47. A ese montón de piedras Labán le puso el nombre de Yegar Saduta, y Jacob lo llamó Galaad.

48. Luego Labán dijo:—Este montón de piedras servirá para recordarnos el trato que tú y yo hemos hecho hoy.Aquel lugar se llamó Galaad

49. y Mizpa, porque Labán dijo:—Que el SEÑOR cuide que nosotros respetemos este trato cuando nos hayamos separado.

50. Y si tú tratas con rudeza a mis hijas, o si tomas otras esposas, yo no lo sabré, pero recuerda que Dios sí lo verá y será testigo de lo que hagas.

51-52. Labán continuó diciéndole a Jacob:—Mira bien, este montón de piedras y este pilar que he levantado entre tú y yo quedan como testigos de nuestros votos. Yo no cruzaré esta línea para atacarte, ni tú la cruzarás para atacarme.

53. ¡Que el Dios de Abraham y el Dios de Najor sea quien juzgue si cumplimos o no este trato!Entonces Jacob juró por el poderoso Dios de Isaac, su padre.

Génesis 31