10. Jacob salió de Berseba y viajó hacia Jarán.
11. Llegó hasta cierto lugar y se quedó allí para pasar la noche, pues ya el sol se había ocultado. Tomó una piedra y la puso como almohada, y se acostó a dormir.
12. Mientras dormía soñó que había una escalera desde la tierra hasta el cielo, y vio ángeles de Dios que subían y bajaban por ella.
13. En el sueño también vio que el SEÑOR estaba parado junto a él y le decía: «Yo soy el SEÑOR, el Dios de tu abuelo Abraham y de tu padre Isaac. A ti y a tus descendientes les voy a dar esta tierra en la que estás acostado.
14. Tus descendientes serán tantos como el polvo de la tierra. Llenarán la tierra de este a oeste y de norte a sur. Todas las naciones de la tierra serán bendecidas por medio de ti y de tu descendencia.
15. Además, estaré contigo y te protegeré dondequiera que vayas, y te traeré de nuevo sano y salvo a esta tierra. ¡Jamás te abandonaré sin haberte cumplido mis promesas!»