49. Ahora, díganme si van a ser bondadosos y leales con mi amo Abraham; si no piensan serlo, también díganmelo. Así yo sabré qué camino tomar.
50. Entonces Labán y Betuel contestaron:—Es evidente que esto es obra del SEÑOR, de modo que en ese caso nosotros no podemos hacer nada.
51. Mire, aquí está Rebeca. Tómela y llévesela, para que sea la esposa del hijo de su amo, tal como el SEÑOR lo ha dispuesto.
52. Al oír la respuesta, el mayordomo de Abraham cayó de rodillas delante del SEÑOR.
53. Enseguida sacó joyas de plata y de oro y hermosos vestidos para Rebeca, y también les hizo valiosos regalos a la madre y al hermano de ella.
54. Luego el criado y sus acompañantes cenaron y pasaron allí la noche.Al día siguiente, cuando se levantaron, el criado dijo:—Debo regresar a casa de mi amo.