5. Este animal, ya sea cordero o cabrito, será un macho de un año y sin ningún defecto.
6. »El animal deberá ser cuidado hasta el día catorce del mes. Ese día, al atardecer, cada familia de Israel sacrificará su cordero o cabrito.
7. Luego tomarán un poco de sangre del animal y la colocarán en los dos postes y en el travesaño de la puerta de la casa en que se han de comer al animal.
8. Asarán la carne al fuego y la comerán esa noche con panes sin levadura y hierbas amargas.
9. Nada crudo ni cocido comerán del animal, sino asado, incluso la cabeza, las piernas, el corazón y el hígado.
40-41. Los hijos de Jacob y sus descendientes habían vivido en Egipto cuatrocientos treinta años, y el último día del año cuatrocientos treinta todo el pueblo del SEÑOR salió de Egipto.
42. Toda esa noche, el SEÑOR estuvo despierto sacando a su pueblo de la tierra de Egipto. Por eso, a los israelitas se les mandó que esa noche de la Pascua la pasaran despiertos, como una manera de honrar al SEÑOR, recordando lo que él hizo por ellos.
43. El SEÑOR les dijo a Moisés y a Aarón: «Estas son las instrucciones acerca de la observancia de la Pascua. Ningún extranjero comerá del animal,
44. pero cualquier esclavo que haya sido comprado podrá comerlo, siempre y cuando haya sido circuncidado.
45. Un empleado, o un visitante extranjero, no podrá participar de la Pascua.
46. Todos los que coman del animal, deberán comerlo juntos en una casa, y no podrá sacarse ni siquiera un pedazo de carne. Al animal sacrificado tampoco se le podrá quebrar ni un solo hueso.
47. Todo el pueblo de Israel deberá celebrar esta fiesta.
48. »En cuanto a los extranjeros, si viven con ustedes y desean celebrar la Pascua, deberán circuncidarse y circuncidar a todos los varones que pertenezcan a su familia. De esa manera serán considerados como parte del pueblo, y por lo tanto, podrán participar de la Pascua. Ninguna persona incircuncisa podrá comer del cordero.
49. »Esta ley se aplicará tanto a los israelitas como a los extranjeros nacidos en Israel».
50. Y el pueblo de Israel siguió todas las instrucciones que el SEÑOR les había dado a Moisés y a Aarón.
51. Este mismo día el SEÑOR sacó a Israel de Egipto, tribu por tribu, como si fueran un ejército.